La firma productora de El Milagrito ha celebrado por cuarto año consecutivo el Día Mundial de la Limpieza, y en esta ocasión lo ha querido conmemorar con la implicación de su plantilla no solo durante esta jornada, sino como hábito de vida. Este año, el equipo de Fabrienvaf Nuca ha plantado cipreses, una acción simbólica y concreta con el objetivo de contribuir no solo a la limpieza del entorno físico, sino también a la mejora de la calidad del aire. Estos árboles serán replantados en el futuro, cuando alcancen su crecimiento adecuado, como parte de un proyecto de mayor envergadura para ayudar a reducir la huella de carbono y combatir la contaminación atmosférica.
Este esfuerzo continúa la tradición que han mantenido en los últimos años, en los que la compañía ha tomado un rol activo en la promoción de la sostenibilidad. En 2021 y 2022, las actividades se centraron en jornadas de concienciación dirigidas a los empleados, utilizando juegos y concursos para involucrarlos en la importancia de la limpieza y el cuidado del planeta. En 2023, dieron un paso más allá y organizaron una jornada de limpieza en la ribera del Guadalquivir, a la altura de Coria del Río, recogiendo residuos para proteger uno de los entornos naturales más valiosos de la región.
Mario González Martín, responsable de calidad y medioambiente de Fabrienvaf, expresó: "Cada año nos sumamos con más fuerza al movimiento global por la limpieza del planeta. Sabemos que es una causa urgente y necesaria, y por ello buscamos nuevas maneras de aportar nuestro granito de arena. Este año queremos contribuir a limpiar el aire, porque sabemos que es un reto vital para el futuro de todos."
Mario González indica que “Hemos elegido los cipreses porque es una especie característica de la zona mediterránea, se pueden plantar en distintos tipos de superficie, se estima que a lo largo de su vida útil compensan aproximadamente 1 tonelada de CO2 cada uno, a lo que se suma que la calidad de su madera es muy buena. Además, se trata de un árbol muy longevo que puede llegar a vivir hasta 300 años y, en sus primeros meses de vida, su crecimiento es muy rápido. Tener un ciprés cerca puede implicar que se ahorre en el entorno entre un 15% y un 20 % de la energía”.
Cada maceta lleva el nombre de un trabajador. “Así personalizamos el cuidado de cada uno de los tiestos con las semillas. La plantilla se va a ocupar de que crezcan y podamos hacer posteriormente la replantación. Aquí entran en juego la concienciación de cada uno de nosotros y nuestra contribución colectiva a la preservación del Medio Ambiente de nuestro entorno”.
Para Fabrienvaf Nuca el cuidado del Medio Ambiente es una prioridad y la empresa cuenta con varios reconocimientos en esta línea, como el certificado de la Huella de carbono, las ISO 9001 y 14001, la certificación EMAS (Eco-Management and Audit Scheme), el de Energía 100 % verde o el de Proveedores Sostenibles, entre otros.